El enésimo truco del "mago" Scariolo
En este pasado Preolímpico, una de las cosas que más ha sorprendido tras haber visto a la selección española, ya no es tan el hecho de que haya logrado la clasificación para los JJOO de París, cuyo objetivo entraba dentro de la normalidad, sino el alto rendimiento de jugadores que han transmitido dudas durante la temporada, o que han tenido escaso protagonismo.
Vamos a analizar, a través de distintos parámetros, el abasto real, y si realmente la gran mayoría de jugadores rinden mejor cuando visten la camiseta roja que en el resto de la temporada.
Parámetros estadísticos para la evaluación
Para realizar el análisis, compararemos la diferencia de 7 parámetros estadísticos, entre la temporada 2023-24 (NBA o competición europea) y el Preolímpico de Valencia de este mes de julio.
Los parámetros estadísticos que utilizaremos son:
Minutos por partido
En distintas ruedas de prensa y declaraciones a los medios, Sergio Scariolo ha sido muy crítico con el escaso protagonismo del jugador español en general en sus clubes. Veremos si la mayoría de los jugadores seleccionados han tenido más minutos en pista con él en el banquillo.
Porcentaje de tiro libre
El momento de lanzar un tiro libre es uno de aquellos instantes en el que más influye la confianza en sí mismo del jugador, y lo cómodo que se puede sentir. Cuanto más presionado se siente un jugador, más difícil es que alcance un mayor porcentaje de acierto en el tiro libre.
Porcentaje real de tiro
Tal como sucede con el tiro libre, cuando un jugador se encuentra cómodo en un equipo, con el estilo de juego, y con el entrenador, puede jugar más suelto y, consecuentemente, tener más confianza y mejorar su porcentaje de acierto en el tiro.
Tiro de campo efectivo (eFG%)
Este parámetro, perteneciente a los "Four Factors" de Dean Oliver, le da un mayor valor al tiro de 3, ya que puntúa más que el de 2, e indica la eficiencia real del tiro, teniendo en cuenta la parte proporcional de los puntos.
Porcentaje de asistencias
Muchas veces, el hecho de tener un mayor sentimiento de pertinencia en un grupo se traduce en mayor rendimiento. Analizaremos si, en líneas generales, los jugadores en la selección española realizan un juego más coral que en sus clubes.
Porcentaje de pérdidas
Otro de los "4 Factors", y muy importante, y es que estos días hemos podido comprobar como el porcentaje de pérdidas es uno de los 3 parámetros de la estadística avanzada más influyentes a la hora de definir los finalistas de cada competición. Cuando un jugador se desempeña sin miedo al error, probablemente cometerá menos errores, y en el baloncesto esto se traducirá en fallar menos tiros y perder menos balones.
Uso de bola (USG%)
Realizamos una estimación de cuánto utiliza el balón el jugador mientras está en pista. ¿Se sienten los jugadores en la selección más protagonistas y más partícipes del juego con el balón en las manos que en sus clubes?
Resultados del estudio
Garuba, Willy y Pradilla
Aquí tenemos los tres jugadores que mejoran en todas las facetas, con una mejora de rendimiento estratosférica por parte de Garuba respecto a su temporada con los Warriors.
Garuba ha tenido una etapa en la NBA muy complicada, donde se ha confiado poco en él, después de haber ofrecido un alto rendimiento en Europa. Sólo ha disputado 18 minutos en toda la temporada. Pero ha sido llegar a la selección, y todo ha cambiado. Su primer partido contra Líbano fue una salvajada.
Luego tenemos a Willy Hernangómez, muy cuestionado por Grimau y por la afición azulgrana. Se sabe que la defensa no es la mejor de sus virtudes, pero Scariolo ha sabido darle la vuelta a la tortilla, compensando la defensa con otros especialistas en esta labor, y sacando a relucir las principales virtudes del madrileño. En lo que se ha notado más mejora es en la poca cantidad de balones que ha perdido en el Preolímpico.
Finalmente, Pradilla sí que ha tenido más o menos los mismos minutos por partido en Valencia y en la selección, pero el juego propuesto por Scariolo parece que le funciona mejor para poder tener un rendimiento más alto.
Aldama, Rudy, Brizuela y Lorenzo Brown
Estos cuatro jugadores son los que completan el elenco de 7 que mejoran como mínimo en 5 de los 7 aspectos que se han analizado.
Aldama y Brown han tenido una buena temporada con los Grizzlies y Maccabi, respectivamente, con lo cual no lo tenían fácil para mejorar su rendimiento, pero así ha sido. En el caso de Aldama, sobretodo ha tenido un mayor protagonismo con el balón en las manos del que tiene en Memphis, pese a jugar algunos segundos menos por choque. Lorenzo Brown, por su parte, lleva a cabo un juego más colectivo con España, aumentando considerablemente su porcentaje de asistencias, mientras con el Maccabi asume más acciones individuales.
Rudy Fernández no lo tenía nada fácil tampoco, y es que lo lógico sería que en la selección española, con el nivelazo que hay, y teniendo en cuenta que se encuentra a las puertas de su retirada, tuviera menos minutos que con el Real Madrid, pero no ha sido así. Scariolo le ha hecho jugar 18 minutos por partido, y el jugador formado en la cantera de la Penya ha respondido con un gran rendimiento, sobretodo en el partido decisivo frente a las Bahamas. Aparte de los datos numéricos, que ya de por sí son muy buenos, su liderazgo en pista es un valor incalculable para el equipo.
En el caso de Brizuela, ha tenido más o menos los mismos minutos que le otorga Grimau, pero en este caso se ha podido sentir más protagonista cuando ha estado en pista, y es que su uso de balón es de casi el doble, y eso le ha dado la confianza para tener un mejor rendimiento.
Díaz, Llull, Arostegui y Núñez
Finalmente, tenemos a los únicos cuatro jugadores que no han conseguido llegar a ofrecer el mismo rendimiento que en sus clubes -Juancho aparte, que no entra en el análisis por haber podido disputar sólo 8 minutos en todo el Preolímpico-.
En el caso de Alberto Díaz, podemos considerar un asterisco, y es que en la selección española tiene un rol de especialista defensivo, con lo cual, entra dentro de la lógica que no tenga los mismos minutos que en Unicaja, ni tenga el mismo uso de balón. Seguramente, si se compararan otros parámetros más centrados en su labor, como los puntos recibidos por el equipo cuando él está en pista, podría salir a relucir realmente todo lo que está aportando al equipo hispánico, que es muchísimo.
El caso de Sergio Llull es algo que le ha perseguido durante toda su carrera, y es que el juego del Real Madrid siempre le ha beneficiado mucho más, y es donde se ha sentido más como pez en el agua. De todas formas, eso no ha impedido que Scariolo le haya sacado a la pista 23 minutos por partido -5 más que en el Real Madrid-.
El caso de Lopez-Arostegui es muy curioso, y es que Scariolo también ha confiado mucho en él, dándole 4 minutos y medio más de los que ha tenido en Valencia, pero el porcentaje de tiro del vasco ha sido muy pobre. No obstante, como el uso de balón también ha sido inferior que con su club, el perjuicio en el equipo ha sido mínimo.
Juan Núñez la verdad es que no ha acabado de rendir como se esperaba. Quizás el hecho de que hubiera el Draft poco antes haya influido, pero lo que hemos visto está muy lejos de lo que se ha visto esta temporada con el Ulm alemán.
Conclusiones del estudio
Tal como se puede observar con los resultados, se puede concluir que Scariolo logra sacar, a través del juego propuesto y de los minutos en pista, un mayor rendimiento en la mayoría de sus jugadores (7 de 11).
Donde más notan esa mejora los miembros de la plantilla es en el porcentaje de tiros libres (9 de 11) y en el porcentaje real de tiro (8 de 11), aspectos donde la confianza y la ausencia de miedo al error son claves, así como en el porcentaje de asistencias (8 de 11), gracias a la propuesta de juego del transalpino, mucho más coral que el de los clubes de procedencia.
La tipología de jugador que se ve más beneficiado al llegar a las órdenes de Scariolo es el que viene de la NBA -sucede tanto con Garuba como con Aldama-, y el que viene del Barça -tanto Willy como Brizuela-. ¿Sucederá lo mismo con Abrines? Pronto lo sabremos
Juegos Olímpicos París 2024
Tras el título Mundial de 2019 y el del Eurobasket 2022, ¿qué truco nos tendrá deparado esta vez Scariolo?